viernes, 9 de junio de 2023

Resumen del panorama actual y aporte al conocimiento de la cria de Lucanidae en cautiverio

Como viene siendo costumbre, después de un larguísimo paréntesis, quiero continuar con mi aportación a la cría de escarabajos y es que hace ya 7 largos años desde la primera publicación del blog y bastantes más desde que el primer escarabajo cayó en mis manos con la intención de cría; desde entonces no he abandonado la ilusión de conocer, aprender y mejorar. 

He de decir sin embargo que las cosas no han tenido la evolución positiva que yo mismo pronosticaba y no estoy hablando a nivel particular, si no a nivel nacional y Europeo. Muchos son los obstáculos que han ido aconteciendo, como la pandemia que ha bloqueado casi en su totalidad el comercio internacional fuera de la Unión Europea (restricciones que post pandemia se mantienen y se seguirán manteniendo) y las duras e incoherentes leyes animalistas impuestas, creo que en parte, aprovechando el aletargamiento de los ciudadanos consecuencia de la avalancha de prohibiciones por la epidemia. Tristemente ya sabemos que el derecho perdido es un derecho casi irrecuperable, al menos en el plazo de una generación.
Este conjunto de circunstancias ha provocado que los precios de los escarabajos se hayan disparado debido a la falta de oferta y por otro lado el poder adquisitivo de los aficionados ha disminuido, provocando que las cepas se debiliten por falta de renovación de sangre con nuevos ejemplares.
Todos los obstáculos deberían ser pocos si la gente lucha y desea realmente algo (sobre todo si ese algo mueve dinero), pero se ha demostrado que esta afición no cuenta con el volumen suficiente en occidente y que todos estos inconvenientes hace que deje de merecer la pena para muchos, sobre todo para el que quiere iniciarse.
Nuestra percepción y cultura hacia los insectos sigue siendo muy pobre y es que no la tenemos arraigada desde niños como en algunos países de oriente, da la sensación que es un hándicap insuperable que evita que la cría de escarabajos despegue.

La parte positiva que he vivido personalmente es ver como especies que parecían imposibles de criar en cautividad hoy son posibles, encontrando detrás de estas algunos criadores europeos que han alcanzado un nivel de conocimiento importante... y sobre todo que aún queda gente con muchas ganas y se las ingenia para seguir trayendo especies poco comunes (aunque bien establecidas en la cría asiática) que incluso regalan parte de su cepa con el único afán de que una especie concreta quede repartida y asentada entre los criadores de occidente fomentando un intercambio continuo para perpetuarla indefinidamente en el tiempo. Sin duda es una lucha contra marea pero que merece la pena.

Arriba For the love of Rhinoceros and Stag Beetles
(Second edition) abajo Breeding Beetles - The substancial
 Guide. Ambos firmados por sus respectivos autores
Esto me recuerda a Benjamin y su nueva obra, la cual os recomiendo fervientemente: Breeding Beetles - The substancial Guide by Benjamin Harink, según mi criterio la única a la altura de la taiwanesa For the Love of Rhinoceros and Stag Beetles de los coautores Jonathan Lai y Ko Shin-ping, con la que tantas horas disfruté repasando de arriba abajo. 
Ben es el ejemplo perfecto de lo que mencionaba anteriormente, alguien que altruistamente regala sus conocimientos en su web Ben's Beetle Breeding Pages - All you need to know about beetles (con la que tanto aprendí cuando era un adolescente y apenas había criado mis primeros escarabajos) y que de forma incansable impulsa el hobby ya sea compartiendo sus experiencias sin tapujos por distintos medios y redes sociales o distribuyendo sus especies y cepas para que lleguen al mayor número de criadores posible.
A la derecha muestro con orgullo mis dos ejemplares dedicados por sus respectivos autores, arriba la segunda edición de Jonathan Lai y abajo la obra de Benjamin, con los cuales he tenido la suerte de poder intercambiar ideas sobre nuestra maravillosa afición.


Después de esta especie de discurso introductorio vamos a la parte útil de la entrada, parece que en todos estos años los Lucanidae son los que se me han dado mejor aunque nunca fueron mi propósito principal y para mi sorpresa muchos grandes criadores me han felicitado por mi trabajo en lo que bajo mi punto de vista no era lo más complicado.

Llegado a este punto no me importa mostrar algunos de los secretos/ truquillos si el fin es que la gente se anime al estar contenta con sus resultados. Por eso voy a intentar desvelar cuales son las claves para obtener ejemplares de gran tamaño en algunos géneros, principalmente Dorcus, el cual trabajé durante muchos años para conseguir excelentes resultados sin la necesidad de usar una alimentación base de kinshi (micelio de hongos) en las larvas.
La alimentación será el flake soil (serrin fermentado), sin ingredientes exóticos ni cosas extrañas, simplemente hay que conocer sus diferentes características y estados para optimizar el crecimiento de la larva en sus diferentes estadíos.


Repasemos que características debe reunir el FS:

  • Grosor del serrín utilizado o granulometría: 
Cuando la larva está recién eclosionada o cuando es una especie de pequeño tamaño tipo Lamprima, Cyclommatus, Rhyssonotus etc un tamaño grande de los granos o escamas de serrín (>0,5cm) podría afectar o incluso detener el crecimiento de la larva. 
He utilizado serrines muy finos, (tipo polvo como el que echan en los suelos de las gasolineras para absorber los residuos) y los resultados han sido buenos tanto para especies pequeñas como grandes, además de muy recomendables para la oviposición. 
En el caso de ser especies cuyas larvas macho sobrepasan los 40g con facilidad prefiero mezclarlo con otros de más grosor (5-7mm aprox.)

  • Diferentes estados de degradación: 
El flake soil aunque lo tengamos aislado y sin uso se encuentra siempre en constante maduración (degradación), y da igual que partamos de serrín crudo, será así siempre que tenga humedad. Este proceso suele ser muy lento, aunque depende de las condiciones ambientales.
Los grandes cambios en su composición los vamos a hacer nosotros de manera artificial con una simple receta:

- 100L de serrín crudo 
- 500g harina de trigo
- 500g de azúcar 
- 250g salvado de trigo 
- Agua. 
- Una vez mezclado remover y airear una vez por semana.

La fermentación entrará en fuerte efervescencia durante la primera semana y terminará casi por completo al pasar un mes aproximadamente. Es entonces cuando podremos de nuevo añadir la harina, el azúcar y el salvado en la misma proporción para provocar otra fermentación y otro cambio drástico en la maduración del FS.
Darle una o más fermentaciones durante su elaboración es una de las claves. A más fermentaciones más oscuro y degradado estará. En esta ilustración muestro los diferentes grados donde el número de fermentaciones expuesto para conseguir cada tipo es orientativo ya que depende de muchos factores como la hidratación del serrín, la aireación del mismo, la temperatura ambiente, los tiempos de curado, tipos y cantidades de aditivos y la velocidad de la proliferación de bacterias.



Ilustración gráfica con distintos géneros de Lucanidae y su afinidad con los distintos estados del FS

Tenéis expuestos algunos de los géneros más representativos en la cría de los Lucanidae y su afinidad con los diferentes estados del FS, la zona roja no es para desecharla completamente, recomiendo meter un 30% de ese tipo mezclado homogéneamente con el de la zona óptima (verde), para mejorar el rendimiento. También podría ponerse un buen puñado estratégicamente en esquinas del recipiente de cría donde la larva irá a buscarlo cada vez que lo necesite sin salir de su zona de confort (zona verde).
En el Odontolabis la zona roja de la derecha es la única que abarca una zona más degradada que la óptima, espero más adelante dedicarle un post para explicarlo y desentrañar sus peculiaridades. 

Me gustaría recalcar que el modo de compostaje del FS se hace a conciencia para acortar los tiempos de degradación y a la vez saturarlo de nutrientes lo máximo posible de forma muy controlada para evitar plagas. De esta manera se evita la aparición de distintos organismos que robarían todos los nutrientes, como los enquitréidos (famosos grindales), hongos y múltiples microorganismos.
De forma incorrecta podríamos pasar el serrín por todos estos estados de degradación hasta convertirlo en polvo; por ejemplo poniéndolo en remojo o hidratarlo simplemente y dejándolo a la intemperie. El proceso seria más largo y descontrolado, por descontado estos indeseados organismos aparecerán por el camino dejándonos un sustrato pobre en nutrientes. Es lo que yo llamaría un falso flake soil.

Sustrato malogrado por enquitréidos, 
obsérvese los diminutos
"hilos" blancos 
El falso FS es complicado de reconocer y la única forma de evitarlo es llevar una rigurosa metodología. Cuando los resultados no salen como esperábamos es probable que esta sea una de las causas. Desgraciadamente también puede ser fruto del azar cuando una plaga se adueña del sustrato silenciosamente y lo empobrece.
A la derecha un fácil ejemplo para detectar la presencia de enquitréidos o grindales, se trata de unos pequeños "gusanos" blancos que trepan con facilidad por las paredes de plástico, dejando sus huellas por las zonas donde hay condensación. Convierten en poco tiempo el sustrato en una tierra sin valor, aparte de que parecen tener la capacidad de echar a perder de los huevos de escarabajos y posteriormente alimentarse de ellos. La forma mas efectiva de eliminarlos es mediante la congelación del sustrato, aunque mi consejo es desecharlo directamente ya que una vez es detectada la plaga habrá perdido probablemente gran parte de sus cualidades.

  • Aditivos:
Como he mencionado no hay aditivos mágicos, tan sólo comprender la biología de estas especies donde en sus estados larvarios de lo que disponen mayormente es celulosa, la cual aportamos tras fermentar el serrín en forma de flake soil. Sin embargo la mayoría de especies viven maderas colonizadas por micelio más o menos vivo, donde de forma fresca o residual deben permanecer sus macronutrientes más importantes, el más abundante los carbohidratos y en menor proporción las proteínas. 
No vamos a disponer de micelio puesto que no vamos utilizar el kinshi, pero vamos a aportarle esos macronutrientes con la harina de trigo que se incluye en la receta.
Tengo que hacer hincapié en este punto que las cantidades de los ingredientes y el momento de utilizarlos no tienen por que seguirse a rajatabla, yo mismo los utilizo a "ojímetro" la mayoría de las ocasiones y en los momentos que considero oportuno; la práctica hace al maestro en estos menesteres.


Terminado el repaso de las características que debe reunir el FS junto a la ilustración gráfica anterior creo que podemos tener una referencia clara de lo que es un flake soil muy fresco y fresco, pues voy a centrarme en los géneros cuyo punto óptimo durante la alimentación larvaria se encuentra en este umbral, que tantas ventajas tiene respecto a sustratos más envejecidos; razón por la cual he tenido tanto éxito con las especies que lo consumen. 

Las ventajas son las siguientes:

- Su elaboración es fácil y rápida al requerir de una o dos fermentaciones solamente.
- El FS en este punto temprano de madurez es muy resistente a la colonización de organismos indeseados. Para que siga siendo así lo recomendable es no mezclar durante su elaboración con otros sustratos maduros que puedan contener plagas.
- Su estabilidad es alta (en gran parte gracias al punto anterior), es decir, la durabilidad de sus nutrientes y propiedades se mantienen largo tiempo antes de pasar a otro estado de degradación por lo que las larvas estarán en un medio óptimo más tiempo. La estabilidad es una de las propiedades más importantes del sustrato.
- Por último, gracias a los dos puntos anteriores, admite mayor cantidad de aditivos que un FS maduro pudiendo aportar con mayor facilidad macronutrientes a nuestras larvas.


Hablemos de mi experiencia con los Dorcus titanus y de una subespecie concreta con la que llevo 8-9 años trabajando, el palawanicus, con el que he renovado sangre alguna vez introduciendo cepas Japonesas y Taiwanesas.
Recuerdo con felicidad aquella primera pareja que recibí de un criador Taiwanés, el macho medía unos 96mm, con unas proporciones poco estilizadas donde el ancho del cuerpo llamaba la atención, era un verdadero monstruo que parecía imposible de replicar y menos sin el uso de kinshi.
Al principio y durante mucho tiempo intenté cultivar micelio en serrín (kinshi), usando materiales equivocados con los que la contaminación del micelio era continua obteniendo pocos cultivos sanos, era un gasto de energía y tiempo tremendo, por suerte paralelamente seguía experimentando con el flake soil.

Mejora progresiva de la marca personal con Dorcus titanus palawanicus




Selección artificial en busca de la mejora de algunas
cualidades de una cepa
El tiempo me fue dejando ver que optimizando el FS era posible, los primeros resultados de más de 80mm aparecían con frecuencia, los 90mm llegaron tímidamente hasta convertirlo en algo más o menos habitual, más infrecuentemente llegaron los primeros 95-98mm hasta que por fin llegó el día, un ejemplar de 102.6mm apareció, hasta la fecha parece ser el más grande de Europa igualado por un buen amigo italiano, Ivan Petri, quien obtuvo un ejemplar prácticamente calcado usando la misma técnica.
Esa meta de 100mm es la que perseguí durante mucho tiempo y a día de hoy creo que se podría convertir en algo frecuente usando la metodología correcta con FS que estoy describiendo y cruzando individuos alimentados en este medio con predisposición a llegar a estas tallas. 




Kinshi VS. Flake Soil

Vamos a ver por que el kinshi funciona mejor y qué hacer para que el FS muy fresco o fresco tenga un rendimiento parecido: 
El kinshi cuenta con una increíble ventaja, esta elaborado en un medio de serrín con aditivos (hidratos y proteínas) previamente esterilizado, es decir, en ese medio de alimentación solo existe teóricamente serrín, aditivos y una especie concreta de micelio (hongo cultivado a conciencia para eliminar la lignina del serrín y exponer su celulosa para la larva). Los únicos organismos vivos son el micelio (que protege el alimento de microorganismos invasores) y nuestra larva. Esto hace que el kinshi sea extremadamente estable en el tiempo y que la larva tenga una disponibilidad completa de nutrientes durante todo su consumo.

Para que el FS muy fresco o fresco sea similar al kinshi debemos seguir las siguientes normas:

- Fermentación rápida y controlada en interior a temperatura constante de 22-26C (1 o 2 fermentaciones máximas, unos dos meses de maduración como mucho).
- No mezclar con sustratos viejos, ni durante la fermentación ni tras ella.
- Crianza de larvas a temperatura estable 21-24C

Temperatura

Mejor marca personal con Cyclommatus metallifer finae
Cuanto más baja sea la temperatura de crianza más estable será el sustrato, muchos Lucanidae crecen bien a menos temperatura de lo habitual. Yo por ejemplo utilizo un frigorífico con termostato y controlador modificado donde mantengo 19ºC todo el año. Ha dado resultados buenos en Dorcus y últimamente también en Cyclommatus metallifer finae consiguiendo una vez más lo que podría ser una de las mejores tallas de Europa (imagen de la derecha). Obsérvese en la foto como el FS donde el escarabajo hizo el cocoon sigue fresco como el primer día (color marrón claro). Esto se traduce en una alimentación óptima desde el principio hasta la pupación.
La teoría dice que a baja temperatura la etapa de larva se alarga más y entonces tiene más tiempo para crecer, pero según mis observaciones se debe a la mejora de la estabilidad del sustrato que provoca un mejor rendimiento en el crecimiento (a menor temperatura más baja es la proliferación de organismos indeseados). Efectivamente la etapa de larva se dilata notablemente, pero por una reducción del metabolismo, el crecimiento sigue siendo proporcional. Digamos que su vida pasa a cámara lenta pero con la ventaja de tener un alimento mucho más fresco.

Volumen de sustrato y su renovación en el estado larvario

Tamaño de pupas macho de D. bucephalus criadas en grupo,
comparativa con imago macho criado en recipiente individual

Quede claro que las larvas de Lucanidae no se deben criar juntas, cuando las he mantenido en grupo por falta de espacio el resultado se ha traducido en pequeños individuos (véase imagen derecha). Si dos larvas tienen un encuentro son extremadamente agresivas, no dudaran en lanzarse a morder y la primera que lo haga ganará. Por eso muchas especies han desarrollado la capacidad de estridular, casi imperceptible para el humano, pero efectivo para otras larvas avisando de lejos de su presencia ( -¡no te acerques  que este sitio está ocupado!).




Lo adecuado es separarlas individualmente, yo lo hago en recipientes con los siguientes volúmenes:

- Dorcus titanus: macho 1500cc- 3500cc; hembra 1000cc
- Phalacrognathus muelleri (imagen inferior): macho 1000cc; hembra 1000cc
- Lamprima: macho 500cc; hembra 280cc
- Prosopocoilus giraffa: macho 1500cc- 3500cc; hembra 1000cc
- Prosopocoilus talla mediana (P. inclinatus y P. bison imagen inferior): macho 1000cc; hembra 1000cc
- Cyclommatus metallifer: macho 1000cc; hembra 280cc
- Lucanus (imagen inferior): macho 1000cc; hembra 1000cc
- Odontolabis: macho 1500cc- 3500cc; hembra 1000cc


Prosopocoilus inclinatus inclinatus 
larvas machos y hembras criadas en 1000cc 
Prosopocoilus bison cinctus
larvas machos y hembras criadas en 1000cc

Phalacrognathus muelleri
larvas machos y hembras criadas en 1000cc


Lucanus judaicus larvas machos y hembras
criadas en 1000cc










Una de las reglas más importante: hay que compactar bien el sustrato a lo largo de todo el recipiente (apretando fuertemente con los nudillos) y posteriormente colocar la larva. Esta regla es imprescindible en especies muy xilófagas como las que tratamos, pero a menos xilófagas (Lucanus, Odontolabis) es innecesario o incluso perjudicial para esta última. 
La renovación del sustrato de 1 a 2 veces durante la etapa larvaria es importante para mantenerlo fresco, por muy estable que este sea, ya que en estos volúmenes la larva lo irá consumiendo y degradando. 
Por regla general hago un solo cambio del 80-100%, cuando la larva llega a L3 temprano o mitad de L3. Cuando se tratan de ejemplares que despuntan y tienden a ser excepcionalmente grandes puedo hacer un segundo cambio de sustrato si veo que este se ha oscurecido o degradado demasiado. Pero nunca si la larva ha amarilleado y está cerca de su peso máximo (observación que te dará la experiencia). Un cambio de sustrato en este periodo puede desencadenar en una pérdida de peso drástica y una pupación prematura echando a perder todo el trabajo.



Set up de cría y dureza de la pieza de madera podrida:

Canibalismo en D.t.yasuokai,
hembra devorando a su descendencia
Los contenedores de cría funcionan mejor si se coloca una sola hembra, en especies pequeñas quizás dos máximo. Las hembras de lucánidos tampoco se llevan bien entre ellas y pueden estresarse, además de que a más hembras por contenedor más larvas depredarán, como ya sabéis tienden al canibalismo de su descendencia. 
La cría de estas especies funciona perfectamente en cajas de tamaño reducido, de 8-10 litros. Dependiendo de la especie la pieza de madera podrida para la oviposición será más o menos indispensable, pero jamás esta de más ya que incita a las hembras a poner mas huevos ya sea en su interior o en su superficie. 

Dureza de la pieza de madera podrida blanca según especie

Dorcus titanus: dureza media/alta 
Phalacrognathus muelleri: dureza media
Prosopocoilus giraffa: dureza media
Prosopocoilus: dureza media
Cyclommatus metallifer: dureza baja 
- Lamprima: dureza baja
- Lucanus: no necesario
Odontolabis: no necesario

Piezas de madera podrida
 colonizadas homogéneamente
por hongos
En términos generales para saber si una pieza de madera (secciones de tronco) esta podrida debe pesar poco cuando esta deshidratada, además con un destornillador de pala debemos poder levantar trozos de madera. Así nos aseguraremos de que realmente es madera podrida por hongos, el medio de puesta idóneo para las hembras de escarabajos ciervo. 
En la imagen de la izquierda se observa unas piezas en un estado óptimo de colonización uniforme por hongos, tras el corte se observa que la madera ha perdido sus anillos y queda con un aspecto blanco y granulado.
Debe tener al menos 10cm de diámetro y unos 30cm de largo.
Antes de colocar la pieza en la caja de cría se satura en un cubo de agua, se escurre bien durante una hora y se retira la corteza.




Arriba muestro un video del "set up" de cría para una sola hembra de Dorcus antaeus. Con una caja de sólo 8 litros, FS limpio y fresco (una vez más, bien compactado) y una buena pieza de madera blanca podrida dejó una descendencia de casi 40 larvas. La revisión y búsqueda de descendencia se realiza tras 2-3 meses, normalmente es cuando las primeras larvas son visibles a través de la parte inferior del recipiente. El resto de larvas debe estar dentro de la pieza podrida y las sacaremos con algún instrumento metálico (destornillador de pala, cuchillo etc.) con mucho cuidado de no dañarlas y de no dañarnos... con práctica iremos mejorando nuestra habilidad. 

P.giraffa keisukei macho de 103.4mm, con las mandíbulas
aún rojizas sin endurecer, 3 días después de emerger
Os dejo para finalizar una serie de fotografías de los resultados de mi cría, esta primera quizás, la más alentadora de los últimos tiempos, pues por muchos años he criado Proposopoilus giraffa keisukei, el escarabajo ciervo mas largo del mundo, (que no el más corpulento) y aún no había conseguido llegar a pasar los 100mm hasta por fin hace poco, habiendo tenido al menos 3 cepas diferentes. La mayoría de los machos obtenidos durante años rondaron los 70-80mm, raramente los 90mm, sin embargo con tantos resultados exitosos en Dorcus titanus ssp. y siendo tan similares en cría no entendí nunca que pasaba; ¿quizás mala suerte hasta que llegó un individuo con la genética adecuada? por ahora no estoy seguro, pero creo que los genes de mis líneas no estaban ayudando. El ejemplar resulta majestuoso sobre una mano adulta pequeña.


Prosopocoilus giraffa keisukei,
pupas macho de gran tamaño
A la izquierda varias pupas de la misma especie que podrían medir tras emerger como imagos entre los 90 y 100mm, fue una generación que unos años atrás dio unos pesos considerables, pero por desgracia las pupas enfermaron por razones que aún desconozco. Los síntomas fueron inmovilidad en la pupa durante casi todo el periodo de pupación tras el cual, el adulto intenta emerger sin fuerzas, no pudiendo deshacerse de la exuvia. No es con la primera especie que me ocurre ni la primera vez. Los secretos de la cría de escarabajos y sus patologías están aun por descubrir, por ahora son contratiempos y decepciones que hay que estar dispuestos a asumir, que no serán pocos.




Machos Dorcus titanus yasuokai 
Grandes machos de D.titanus yasuokai











Larva macho de D.t.palawanicus
Machos de Dorcus titanus palawanicus

      
     Machos de Dorcus titanus typhon emergiendo
cocoons de espuma floral artificial

Comparativa de grandes machos
de D.t typhon y D.t.yasuokai
Pupas macho de Dorcus titanus typhon


Machos de gran porte de D.bucephalus




3 comentarios:

  1. Se aprecia una gran pasión y mucha generosidad en el autor del artículo

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  2. Grandísimo trabajo didáctico Fernando, muchas gracias por tus aportes que nos sirve de ayuda a tantos, un saludo

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  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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